Existen sujetadores de todas las formas y colores, y para sentirte más cómoda a la hora de hace deporte, es bueno tener el sujetador deportivo que mejor te funcione. No debes buscar únicamente el que se vea más bonito, ni el que sea más cómodo necesariamente, sino el que tenga el soporte adecuado para el ejercicio que vayas a realizar. Ten en cuenta que el pecho de es una de las partes más sensible de la mujer y debes cuidarlo de igual manera que otras partes de tu cuerpo.
Hay que tener en cuenta que, al correr, por ejemplo, los senos se mueven hacia arriba, hacia abajo, y hacia ambos lados y el sujetador deportivo debe disminuir este movimiento en un 50 – 60% aproximadamente. Estos rebotes, si no se previenen, pueden ocasionar que los ligamentos de Cooper – los que le dan el soporte necesario a la mama- se estiren de manera permanente y, por lo tanto, el seno se vea caído. Además de unos senos caídos, un sujetador deportivo poco adecuado puede generarte dolores de espalda y problemas a largo plazo por malas posturas. A continuación, te daremos algunas recomendaciones para que te sientas cómoda y te ejercites de la mejor manera posible con el sujetador deportivo adecuado para ti.
Consejos para escoger el mejor sujetador deportivo
Elige un sujetador de tu talla
Lo primero que debes tener en cuenta es la talla. Es importante que siempre te pruebes el sujetador antes de comprarlo, para asegurarte que la talla que estás comprando es la correcta. Recuerda que no todas las tallas son iguales y que varían según la marca y modelo. Cuando lo tengas puesto, verifica que sea cómodo y que te de libertad para hacer todos los movimientos sin que el busto se mueva demasiado.
Selecciona uno acorde con tu copa
Con respecto a las copas, si usualmente tienes la talla A o B, te conviene más utilizar los sujetadores deportivos ajustados que son como un top. Si tienes la C o D no es recomendable que uses un sujetador tan compresivo, debes usar aquellos que sujetan cada seno por separado.
Apuesta por un sujetador cómodo y transpirable
Con respecto al material y las costuras, es importante que no te moleste. Las costuras deberían ser planas, y si no las tiene, ¡mejor! El material debe ser transpirable, preferiblemente los de tecnología climacool o dry fit, que te permite transpirar, pero al mismo tiempo estar seca y cómoda.
Compra tu sujetador deportivo en función del tipo de deporte que realizas
Por último, pero no menos importante, hay que pensar también el tipo de deporte que vas a realizar con tu sujetador. Existen deportes o ejercicios de alto, medio y bajo impacto: Los de alto impacto son aquellos en los que hay mucho movimiento como, por ejemplo, correr; los de medio impacto son ciclismo, o caminatas rápidas; y los de bajo impacto tienen muy poco movimiento, entre ellos están el yoga y pilates.
Como su nombre indica, los de alto impacto son los que necesitan mayor soporte, y los de bajo impacto no necesitan un sujetador tan compresivo ni con tanto agarre. Los sujetadores que tienen mayor sostén son aquellos que en la espalda son más estrechos, pero son solo de una pieza. Por otro lado, los que tienen tiras cruzadas tienen un sostén intermedio, y los que tienen tiras sin cruzar son los que tienen menor soporte.
¿Cómo lavar y mantener tu sujetador deportivo?
Si quieres que tu nuevo sujetador deportivo te dure lo bastante tiempo y puedas aprovecharlo bien, a continuación, te damos algunos consejos para lavarlo y mantenerlos:
- Lava el sujetador en agua fría con un detergente suave. Lo mejor es hacerlo a mano, ya que algunos programas de lavadora utilizan un centrifugado muy fuerte que puede romper algunas tiras del sujetador y dejarlo inservible.
- Evita el suavizante y la lejía.
- A la hora de secarlo, lo mejor es tenderlo por la costura de abajo. Si quieres usar la secadora, programa el ciclo de secado en frío. Es importante que no uses el programa usual ya que el calor descompone el material y el sujetador se deforma.
Esperamos que con todos estos consejos puedas escoger el sujetador deportivo que más te convenga según tus características y el deporte que practiques. Recuerda que siempre debes sentirte cómoda para practicar bien cualquier ejercicio.
