Sea cual sea tu estilo: corto, largo, ondulado o con rizos de caracol, para conseguir un cabello perfecto es imprescindible que tu pelo este sano. El pelo es un elemento indispensable de nuestra imagen, a simple vista dice mucho de nosotras ya que no se trata solo de un tipo de peinado o un tinte luminoso, es mucho más.
Nuestro pelo es una extensión de nosotras mismas, es un elemento vivo que necesita ser cuidado. Como todas las partes del cuerpo, nuestro cabello cumple una función biológica. En el caso del pelo, esta función es doble: por un lado, tiene la función de proteger nuestra cabeza de los agentes externos; Por otro lado, ayuda a mantener la temperatura del cuerpo al evitar que se pierda el calor.
Tenemos, de media, más de 100.000 pelos en nuestras cabezas. El crecimiento medio del pelo se calcula en torno a los 1,25 centímetros al mes. El ciclo de crecimiento está entre los dos y los seis años, tras ese periodo, el pelo se cae –se pierden entre 50 y 100 pelos cada día- En la misma raíz, pasados unos meses, volverá a crecer otro pelo. Y así, con cada uno de los más de 100.000 pelos.
No hay dos cabelleras iguales, eso está claro. El hecho de que tengamos el pelo de una forma u otra, depende de muchas variables: Nuestro pelo será más fino o más grueso, rizado o liso en función de tamaño y la estructura del folículo de la raíz. En relación con el color, este tiene su razón en la melanina, esta sustancia también es la responsable de color de nuestra piel, además del cabello.
No tenemos ninguna influencia sobre el tamaño o la estructura de nuestros folículos, como tampoco sobre la cantidad de melanina de nuestro cabello. No podemos decidir cómo va a nacer nuestro cabello, pero lo que si podemos hacer es decidir cómo queremos lucirlo.
¿Cómo tener el cabello perfecto que siempre hemos deseado?
Independientemente del cabello con el que sueñas, rubio, rizado o liso, resulta imprescindible que tu pelo este sano si quieres que luzca bonito.
El lavado del cabello
El lavado del pelo es fundamental, aunque siempre se ha escuchado el rumor de que lavar mucho el pelo hace que se caiga con más facilidad o ayuda a la producción de grasa. Como ya hemos visto, el pelo se cae cuando llega el final de su ciclo y es sustituido por otro. En cuanto a la producción de grasa, está determinada por nuestras glándulas sebáceas y el lavado no afecta en este sentido. Lo único cierto de toda esta rumorología es que, si tienes el pelo graso, deberás lavarlo más a menudo, al menos cada dos días.
Lo ideal para el cabello normal, es lavarlo cada tres días. Siempre es mejor que usemos un champú neutro, sin elementos que puedan dañar nuestro cabello. Si queremos usar algún champú especifico, debemos intercalarlo con champús neutros. Respecto a la cantidad de champú necesario para lavar, basta con un poco para el pelo corto y unas gotas más para el pelo largo. Debemos lavar nuestro cabello durante 3 minutos, masajeando nuestro cuero cabelludo con las yemas de los dedos. El aclarado, mejor con agua fría o templada -el agua caliente daña el cabello- y también durante tres minutos.
El peinado del cabello
Tras el lavado, hay que desenredar el pelo con cariño y sin tirones. Si hay muchos nudos, lo más sencillo es usar un buen acondicionador y desenredar en mojado con un peine de púas.
Teniendo claro como lavar nuestro pelo, el siguiente paso es el cepillado. Cepillar el cabello, al menos, dos veces al día es fundamental, este proceso estimula la raíz, así como el folículo y ayuda a que el cabello crezca sano y fuerte.
Cuidados adicionales para el cabello
También es muy recomendable no abusar del uso del secador o las planchas. El calor, incluso cuando tomamos el sol, daña nuestro cabello, también seca el pelo y le quita la grasa natural, por lo que queda más frágil y quebradizo.
Tampoco es bueno para el pelo el uso habitual de tintes o tratamientos químicos. Estos productos producen el mismo efecto en tu cabello que el calor: lo seca y le quita la grasa natural.
Si te gusta cambiar de look cada poco tiempo y darle un toque distinto cada vez, lo ideal es que uses productos de buena calidad y te pongas mascarillas hidratantes con frecuencia. Con esto, conseguirás contrarrestar el efecto de los tintes y los aparatos de calor. También es importantísimo que cortes las puntas asiduamente, es la mejor manera de mantenerlo sano y fuerte.
La alimentación
Como parte de nuestro cuerpo, el pelo es sensible a nuestra alimentación. Igual que nuestros órganos y músculos agradecen una alimentación sana y equilibrada, nuestro cabello es también un producto de nuestra comida. Comer sano y equilibrado nos ayuda a mantener un cabello brillante y resistente.
Especialmente, debemos cuidar la ingesta de proteínas. El cabello está hecho de proteína, por lo que, si no consumimos la suficiente en tu dieta, tu cuerpo luchará por reajustar los desequilibrios del cabello. Lo idea es incluir en cada una de nuestras comidas, alimentos con proteínas para evitar deficiencias nutricionales. En el caso de los veganos, pueden elegir entre legumbres, tofu y soja -se ha demostrado que la soja fortalece el cabello y promueve su crecimiento-.
El estrés
El estrés provoca la caída del cabello en épocas donde hay crisis y es el enemigo del pelo grueso y saludable. Para remediar la caída del cabello, la meditación, el yoga, caminar en la naturaleza, asistir a espectáculos de humor, hacer boxeo o jardinería, son buenos aliados, ya que son actividades que ayudan a mantener una actitud positiva y a alejar los pensamientos negativos que son las que provocan el estrés, en la mayoría de los casos.
