¿Por qué es aconsejable utilizar un champú sin sulfatos ni siliconas? ¿Cuáles son los beneficios que trae para el cabello? Pocas mujeres tienen en cuenta la composición de un champú del supermercado: parabenos, sulfatos, aluminios y siliconas; la gran ventaja de este tipo de champús es su bajo costo, si se le compara con champús con ingredientes más naturales.
¿Por qué utilizar champús sin sulfatos ni siliconas?
Los sulfatos de un champú tradicional producen sequedad en el cuero cabelludo; las consecuencias de su uso prolongado son perceptibles: picores y descamación o caspa. Los sulfatos en los cabellos teñidos, por ejemplo, hacen que el pelo pierda la intensidad del color con los lavados; algunas tonalidades, como los rubios, se vuelven cobrizos, amarillentos y con aspecto desgastado. Además, los champús con sulfatos no se aconsejan en las pieles atópicas o sensibles; éstos pueden producir irritación y descamación, por lo que lo mejor es evitarlos por completo.

La mayoría de las personas utiliza productos del supermercado que no están libres de sulfatos, siliconas ni metales, pues se trata de una opción rápida y de bajo costo. Estos champús son engañosos pues crean un efecto instantáneo de suavidad y brillo; sin embargo, si miramos más de cerca, el pelo solo se debilita con los lavados. Si a esto se añade la acción del secador, las planchas y los agentes contaminantes como la radiación solar e incluso el viento, las consecuencias son peores. Los champús que no están libres de estas sustancias depositan en la cutícula restos de metales así como de contaminación. De ahí que cuando llega el momento de teñirse, los resultados son defectuosos.
A estas alturas es posible que te preguntes qué son los sulfatos y por qué tantos productos lo incorporan en su fórmula. Pues los sulfatos son activos que limpian el cabello y hacen espuma. ¿Y las siliconas? Estas son derivados del plástico y son las que se utilizan para dar brillo a la melena, pero con apelmazamientos; las siliconas actúan de tal manera que crean una película sobre la melena y que impide que los nutrientes penetren en el cabello.
Por otra parte, muchas de estas fórmulas incluyen parabenos, que son conservantes que evitan que estos champús pierdan su efectividad. Hoy en día cada vez más champús se venden sin sulfatos, ni siliconas, ni parabenos. Sin embargo, entre estos tres componentes, los parabenos aún son frecuentes en algunos productos.
¿Existe el champú perfecto?
Los champús sin sulfatos ni siliconas son la mejor opción si quieres tener el pelo sano desde la raíz hasta la punta. Este tipo de productos son los mejores aliados para los tipos de cabellos. Los más beneficiados, además de las melenas teñidas, son las que tienen rizos; y es que los champús con siliconas lo que hacen es aportar peso al cabello y, en consecuencia, el rizo pierde densidad y se ve ligeramente alisado. Por eso es que para tener unos rizos bien definidos, lo mejor es utilizar un champús sin sulfatos ni siliconas; estos, además, aportan más volumen. En el caso de las melenas lisas, las siliconas aunque parece que alisan el pelo, lo que hacen en realidad es apelmazarlo.
Los champús sin sulfatos ni siliconas son perfectos para todos los tipos de pelo, pues tienen una serie de beneficios para la salud capilar. Un buen champú, libre de estas sustancias, previene la deshidratación, a la vez que evita irritaciones del cuero cabelludo; también protege la salud de la melena a largo plazo. Es verdad que estos champús son un poco más caros que los champús tradicionales, pero no tienes que preocuparte, pues la inversión vale la pena. A la larga, si continúas con un champú que contenga sulfatos y siliconas, terminarás haciéndote con mascarillas y otros productos que pueden restaurar el cabello, pero si no cambias de champú, los resultados serán los mismos.
¿Cómo debe ser un buen champú? Para empezar, debe ser muy fácil de retirar, no debe irritar la piel ni los ojos, ni dañar el cabello. Además, es ideal que sea biodegradable y que no sea tóxico. El mejor champú es el que no tiene sulfatos (compuestos químicos), que disuelven la suciedad; también es aconsejable utilizar un producto que sea capaz de penetrar bien el cuero cabelludo.
Basta con leer la etiqueta del producto para saber que no tiene ni sulfatos ni siliconas. Encontrarás que la gran mayoría incluyen la leyenda Sodium Lauryl Sulfate.

Beneficios de los champús sin sulfatos ni siliconas
Si utilizas champús sin sulfatos ni siliconas y parabenos, puedes tu pelo puede obtener grandes beneficios:
- El cabello estará más fuerte y saludable
- Melena con brillo
- Adiós al pelo rebelde y encrespado o con frizz
- No más irritación del cuero cabelludo
- Las melenas teñidas conservarán su color por más tiempo
- Los aceites naturales del pelo se vuelven más efectivos
Para algunos expertos, el uso de los sulfatos es necesario, pues estos son capaces de separar la grasa del cabello y encapsularla; de ahí que sea fácil arrastrarla con el aclarado. Por otra parte, como los sulfatos son los que forman la espuma, el lavado del pelo será mucho más fácil. ¿Cómo saber si necesitas o no un champú sin sulfatos ni siliconas? Lo mejor que puedes hacer es acercarte a un profesional. Pero si tienes el pelo teñido, rizado o con tratamiento de keratina o si eres de piel sensible, entonces lo mejor es que destierres estos químicos de tu rutina capilar.
¿Acondicionador sin sulfatos?
Además de utilizar un champú sin sulfatos ni siliconas, también es aconsejable completar la rutina capilar con un acondicionador libre de sulfatos, siliconas y parabenos. El acondicionador es un producto que no puede faltar en el cuidado de la melena, pues éste cuenta con una fórmula única que ayuda a proteger y embellecer el cabello. El acondicionador lo que hace es reducir la inflamación de la cutícula que el champú puede ocasionar, además deja el cabello listo para peinar; por otra parte, el acondicionador mantiene la humedad, previene la deshidratación y mantiene el brillo natural del cabello.
Es aconsejable sustituir el acondicionador tradicional con siliconas y parabenos, pues las siliconas, aunque a primera vista parecen buenas, lo que hacen es impedir que el cabello transpire y, en consecuencia, se debilita. Por eso es aconsejable utilizar un acondicionador que cuente en su fórmula con aceites y ceras vegetales que permitan la nutrición e hidratación del cabello de forma natural. Dentro de estos productos encontramos, por ejemplo, la proteína de trigo y de soja, extractos de alga, etcétera. No te preocupes si has estado utilizando silicona durante mucho tiempo, pues ésta desaparece después de un mes si dejas de usarla.
Nuestras recomendaciones de champús sin sulfatos ni siliconas
Si estás decidida a desterrar estos agentes químicos de tus productos de belleza capilar, te aconsejamos una serie de champús y acondicionadores que puedes utilizar. No te olvides de leer la etiqueta y las recomendaciones de cada fabricante y, por supuesto, escoger según tu tipo de pelo. ¿Champú sólido o líquido? ¿Para cabello liso o rizo? Incluso puedes encontrar opciones con keratina para una restauración profunda del cabello, como lo son los champús de la familia OGX.
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1 comentario en «¿Cómo escoger un champú sin sulfatos ni siliconas?»
Tengo el pelo rizado y siempre me ha preocupado mucho la salud de mi pelo, hace bastante tiempo me advirtieron sobre los sulfatos. El problema es que no encuentro el champú que me funcione y me deje el pelo como a mi me gusta. Y los que me gustan como me dejan el pelo, tienen sulfatos. Como veis siempre estoy entre la espada y la pared.
Me recomendais alguno en concreto. Muchas gracias. Un artículo maravilloso. Besos