Una de las grandes preguntas que los profesionales sanitarios se hicieron con la crisis del Covid-19 fue cómo está afectando psicológicamente el coronavirus a la sociedad. Durante unas semanas, la gran mayoría se centró en las secuelas físicas, pero a medida que el confinamiento se ampliaba, empezó a notarse cómo ciertos trastornos, como la ansiedad, afectaban cada vez a más personas. Por este motivo, a lo largo de este artículo hablaremos de este tipo de situaciones y de cómo hacerles frente para sentirnos más fuertes.
Cómo está afectando psicológicamente el coronavirus
Para explicar cómo está afectando psicológicamente el coronavirus a la población, es importante destacar que son muchos los factores que están influyendo sobre las personas. El más llamativo es el de la cuarentena. Se trata de un proceso en el que hemos visto cómo nuestras rutinas se rompían y cómo se reducía nuestra libertad de actuación, incluso para realizar aquellas actividades que más nos gustan. Además, nos hemos visto obligados a separarnos de toda la gente que queremos. Salir al parque, ir a ver a un amigo o visitar otro municipio que no fuera el nuestro se han llegado a convertir en acciones ilegales durante el desarrollo del Estado de Alarma.
El coronavirus no solo ha limitado este tipo de hechos, sino que además ha creado sobre nosotros una gran incertidumbre respecto a nuestro puesto de trabajo. Asimismo, ha generado un miedo atroz frente al contagio. También, nos ha afectado tener que convivir con nuestra pareja, padres o hijos, durante 24 horas al día. Sin duda, una situación difícil para cualquier persona puesto que todos necesitamos nuestro espacio.
Consecuencias del coronavirus en la salud mental
Con todo lo anterior, es obvio que son muchas las consecuencias psicológicas que hemos sufrido y que seguiremos sufriendo mientras dure esta situación. En este apartado describiremos algunas de las más importantes.
Ansiedad, miedo y apatía
Sin duda, han sido las protagonistas en las últimas semanas. Estas emociones son consecuencia de la incertidumbre que la situación genera. De esta forma, pueden aparecer pensamientos de tipo catastrofistas y anticipatorios. Ha sido muy común ponerse en los peores y más improbables escenarios, lo que ha generado mucho malestar.
Incertidumbre
El ser humano necesita saber qué es lo que va a pasar a continuación con el fin de poder anticiparse a lo que va a ocurrir. Intentamos controlar constantemente todo aquello que nos rodea. Al ser la mayoría de las veces imposible, nos causa mucha ansiedad.
Frustración
Sentir que no podemos hacer nada ante una crisis mundial, tan solo esperar y cumplir con las pautas que se nos marcan por parte de los gobiernos, nos genera mucha frustración.
Exceso de información

Por otro lado, el exceso de información puede generar consecuencias negativas sobre nuestro estado de salud física y emocional. En las últimas semanas, hemos recibido un aluvión de noticias por diversas vías: la televisión, la radio, Internet o los chats de WhatsApp. De esta manera, la epidemia del coronavirus se ha convertido en el tema central de cualquier conversación.
La sobreinformación puede generar en nosotros estrés, angustia, ansiedad o preocupación. Así, nos hemos visto constantemente buscando noticias que respondieran a nuestras dudas, analizando el número de contagios o el desarrollo del virus con el calor, por ejemplo. Además de la ansiedad, esta situación ha provocado la aparición de diferentes síntomas que pueden confundirse con aquellos provocados por la Covid-19, generándose así cierta hipocondría.
Cambios emocionales
En este tiempo de confinamiento nos han acompañado ciertos cambios emocionales. Así, unos días hemos podido sentir que nuestro estado de ánimo se mantenía estable, mientras que en otros sentíamos emociones muy desagradables, como la tristeza, el miedo o el enfado. También hemos convivido de forma más intensa con la irritabilidad, la angustia, la preocupación, el estrés, los síntomas depresivos y los problemas de sueño, entre otros.
Estrés postraumático
Más a largo plazo, el confinamiento puede ser causa de la aparición de trastornos de tipo emocional. Estos pueden ser la ansiedad, la depresión o trastornos postraumáticos.
Recomendaciones de los psicólogos ante la crisis del coronavirus
Para hacer frente a esta situación de una forma más sencilla, dentro de la gravedad, los psicólogos han ofrecido una serie de consejos para ayudar a la sociedad.
Identificar los pensamientos
Es muy importante identificar aquellos pensamientos que nos pueden generar malestar. De esta forma, será más fácil analizarlos, razonarlos e intentar solucionarlos.
Aceptar las emociones
Es lógico que en un momento así sintamos rabia, tristeza, impotencia y que estemos más sensibles. Por ello, lo último que debemos hacer es culparnos de ser débiles o de no estar a la altura de las circunstancias. Además de ser un pensamiento erróneo, solo sirve para acentuar las sensaciones negativas.
Evitar hablar constantemente del coronavirus
Si algo nos hace daño, encerrarnos en ese tema constantemente no nos beneficia en absoluto. Lo mejor es intentar hablar de cosas que nos hagan sentir bien y nos alivien por dentro. Puede ser una serie de televisión o un bonito recuerdo.
Dosificar la información
Por último, los expertos recomiendan evitar la sobrecarga de información, ya que si estamos permanentemente conectados puede aumentar un nerviosismo innecesario. Además, debemos priorizar las fuentes oficiales y no dejarnos atrapar por noticias negativas.