No debemos asustarnos porque aparezca un punto rojo en la piel, es común que estas anomalías se muestren en cualquier momento. Los lunares rojos surgen con la edad, usualmente en zonas como la espalda, tórax y cuello, aunque también aparecen en otras zonas como la cara, los brazos o el pecho. Son llamados Nevus Rubi o angiomas y suelen tenerlos personas de piel blanca de entre 20 y 30 años.
Los lunares rojos surgen en la piel por diversos motivos, la herencia familiar, la edad o alteraciones en el cuerpo que no provocan ninguna enfermedad, pero señalan que algo está sucediendo en el organismo. Los puntos rojos aparecen porque crece el vaso sanguíneo, algo que sucede por la edad, pero que debe ser tenido en cuenta ya que, si aparecen bastantes, pueden indicar que hay aspectos básicos de la salud que se tiene que atender.
Causas de la aparición de lunares rojos
Como hemos comentado, la aparición de los lunares rojos se debe a diferentes motivos expuestos a continuación.
Cúmulo de toxinas
Cuando los lunares rojos aparecen repetidamente y en abundancia, puede señalar alguna alteración en los intestino o hígado, provocado por el cúmulo de toxinas consecuencia de una dieta poco saludable.
Exposición al sol
Cuando los lunares rojos aparecen en la casa, posiblemente sea debido a que la cara se ha expuesto mucho tiempo al sol sin ninguna protección. Para prevenir esto, lo mejor es comprar un protector solar de calidad, visitar un dermatólogo y evitar excesos.
Alteraciones hormonales
Es frecuente que aparezcan los lunares rojos durante el embarazo por los cambios hormonales, en cambio cuando la gestación acaba, estos puntos rojos desaparecen. También pueden aparecer en mujeres con cambios hormonales muy frecuentes, en estas situaciones lo mejor es visitar al ginecólogo.
Recomendaciones para prevenir la aparición de lunares rojos
En el caso de que se note el cambio de tamaño de un lunar rojo, empieza a sangrar o cambiar la forma, lo mejor es ir al médico. En el resto de situaciones, los lunares rojos no son una causa especial por los que recibir asistencia médica. La prevención más adecuada es tener una alimentación sana y hábitos saludables. Los 2 litros de agua al día son esenciales, alimentarse con verduras y frutas frescas es básico e ingerir grasas más saludables es mucho más sano. La piel se mantendrá impoluta, al mismo tiempo que el cuerpo se mantendrá sano durante largo tiempo.