Desde el antiguo Egipto cuando Cleopatra mataba hormigas para poder hacerse la raya del ojo hasta la actualidad, ha llovido mucho. Hoy en día invertimos más dinero en la máscara de pestañas –las españolas las intercambiamos mucho- que en un lápiz labial. Mejorar la técnica para combinar el eyeliner y la máscara de pestañas dependerá de los productos que tengas y si son buenos o no.
El eyeliner y la máscara de pestañas son los productos de maquillaje que toda mujer se compra primero durante su adolescencia, y casi siempre elige el color negro para los dos. Estos dos productos de belleza también se encargan de darle un nuevo aspecto al rostro para llamar la atención, ya que un buen brochazo que le dé volumen a las pestañas y un buen eyeliner para hacerse la raya en el ojo, puedes cambiar mucho tu aspecto, ampliar la mirada, hacerte más joven y cambiar tu expresión.
Como decía Nicolas Degènes, director artístico de Givenchy: “Los ojos son el camino hacia el alma del corazón”. Ellos son los responsables de nuestra expresión y eso se nota cuando lloramos o reímos, por eso merecen ser bien tratados y maquillados.
Desde tiempos ancestrales nos ha gustado maquillar nuestros ojos para resaltar nuestra belleza. En la pasarela, en el cine, en las redes sociales, los ojos siempre son los principales protagonistas de un maquillaje espectacular. Los profesionales encuentran en esta “parte del alma” el lienzo ideal para lograr una mirada salvaje al alargar el rabillo, dibujando la raya por dentro –muy tradicional- y trazando el eyeliner para que espese y se extienda como si fuera un abanico.
Antiguamente, el lápiz negro era la primera incursión en el mundo del maquillaje –incluso antes del colorete y la barra de labios-. Seguramente, aún recordarás cuando tu madre te decía que la línea negra te la hicieras por dentro del ojo en los primeros pasos de tu día a día en el maquillaje. En la actualidad, las modas han avanzado y la oferta de productos de maquillaje para combinar el eyeliner y la máscara de pestañas es infinita. Esta es la primera combinación de las adolescentes que empiezan a maquillarse para realzar su mirada.
Con tinta de gel y pincelito (lo tienen M.A.C. o Bobbi Brown), en forma de rotulador para un trazo limpio (de Benefit, L’Oréal Paris…), khol o kajal suave de reminiscencias árabes para ojos sensibles (Lancôme, Sensilis…), o el clásico lápiz de toda la vida que se afina con el sacapuntas (Chanel, Dior…). Las múltiples opciones crecen cada temporada. Pero todos ellos tienen un objetivo común; potenciar la mirada, dar profundidad al ojo y, sin lugar a dudas, hacernos sentir más guapas.
Efectos al combinar el eyeliner y la máscara de pestañas
Metal festivo
Define el contorno con un eyeliner color bronce, plata u ocre y hazte la raya del ojo. Después, trabaja las pestañas con una buena máscara que las extienda en forma de abanico. Además, esta opción es perfecta para conseguir efectos de fantasía: smokey eyes con huellas de resaca, dobles rayas, trazos cubistas o acabado en negativo.
Tecnicolor
Repasa el inicio de las pestañas del párpado superior con eyeliner de color negro y haz que pase por encima del extremo del ojo. Después, dibuja las inferiores con un tono glitter. No te cortes y combina estos colores en el párpado superior. ¿La clave para que lo consigas? Pon la cantidad justa de máscara de pestañas para que se vea el resultado.
Total black
Dibuja la línea de pestañas de arriba y abajo y conéctalas en el lagrimal creando una V. Para dar otros acabados, aplica más intensidad en el lagrimal y contornea la parte superior con polvos blancos.
