Co-washing es la abreviatura del término inglés “conditioner washing”, lo que se traduce como «lavado con acondicionador». Como su propio nombre indica, consiste lavar el pelo con tu acondicionador favorito en lugar de con champú. Además de mantener el pelo hidratado, todos los acondicionadores contienen una pequeña cantidad de “champú” suave, por lo que el co-washing es el método perfecto para lavar el pelo rizado.
Esta tendencia nació gracias al “Curly Girl Method”, basado en proporcionar y mantener la máxima hidratación posible para que el cabello rizado, por naturaleza seco y encrespado, pierda el frizz y tenga unos rizos saludablemente definidos de forma natural. Tanto el cabello rizado como el ondulado tienen una tendencia natural a ser más secos que el liso, debido a que los aceites naturales creados por el cuero cabelludo tienen más dificultades para llegar a la totalidad del cabello por los giros y vueltas propios de los rizos. Por este motivo, si sigues el método del co-washing con regularidad, obtendrás unos rizos más definidos y nutridos, y ayudarás a prevenir las temidas puntas abiertas y otros problemas –debilidad, falta de brillo, caída excesiva- propios del pelo rizado.
El co-washing se está volviendo tan popular que las empresas de productos capilares ya ofrecen acondicionadores que contienen champús sin sulfato y que pueden usarse para lavar el pelo directamente. Si tienes el pelo rizado y te estás planteando unirte a la tendencia del co-washing, aquí tienes cinco cosas básicas que debe saber antes de comenzar
1. El co-washing no es para todos
Si padeces de alguna afección del cuero cabelludo (como por ejemplo la dermatitis), el co-washing ocasional está bien, pero hacerlo de manera continuada podría empeorar esta condición. Además,los beneficios del co-washing dependerán siempre del tipo de cabello que tengas, por lo que puede que no sea para ti. Si tienes pelo graso, por ejemplo, necesitarás un champú para eliminar el exceso de grasa y no un acondicionador.
2. El co-washing puede no ser suficiente
El hecho de que los acondicionadores específicos para el co-washing incluyan el término «limpieza” o “limpiador” de cabello» puede ser un poco engañoso. Hay ciertas propiedades que tienen todos los champús, pero que están ausentes en algunos acondicionadores. Por ejemplo, muchos champús tienen un pH bajo. La acidez del champú aumenta la cutícula capilar, lo que facilita la eliminación de la suciedad y la acumulación de productos. Los champús también tienen agentes específicos que limpian el cabello y el cuero cabelludo, y aunque algunos acondicionadores también los incluyen, no todos lo hacen.
3. Combina con un champú sin sulfato
Tal y como hemos explicado en el punto anterior, tu cabello y cuero cabelludo aún necesitan un champú suave para limpiarlos adecuadamente. Si dejas de usar champú durante mucho tiempo y utilizas únicamente el acondicionador, puede que no estés eliminando toda la suciedad y que empiece a picarte la cabeza. Por ello, aunque se siga el método del co-washing es recomendable utilizar un champú sin sulfatos una vez a la semana, además del co-washing habitual.
4. Vigila los componentes de tu acondicionador
Si vas a decidirte por unirte al método co-washing, es importante que tengas en cuenta cuáles son los componentes del acondicionador que vas a utilizar. Evita las marcas baratas y famosas, pues contienen demasiados productos sintéticos. Los aditivos sintéticos como las siliconas no son solubles en agua, lo que dificulta la limpieza del cabello y resulta en la acumulación de suciedad en el pelo y el cuero cabelludo. Escoge acondicionadores naturales sin aditivos ni parabenos, y a ser posible que contengan una determinada cantidad de champú sin sulfatos.
5. Lava tu cabello cuantas veces sea necesario
Si no cas a estar usando un champú agresivo y que reseca el pelo, puedes lavártelo con la frecuencia que desees, en función de tu horario, el clima, y tu tipo de cabello o la actividad deportiva que hagas. Eso sí, debes tener en cuenta que tu cabello es más frágil cuando está mojado, por lo que debes evitar cepillarlo cuando está mojado para que no se debilite, y tiene que secarse completamente antes de volver a lavarlo. Presta atención a tu pelo para saber si el co-washing está funcionando y cómo le está sentando: si tiene un aspecto hidratado y natural, lo estás haciendo bien; pero si está esponjoso, flojo o incluso blando, te estás excediendo.